Las Universidades debe ser un espacio crítico, de reflexión y sobre todo apertura ideológica. Un centro donde aparte de ayudar en la construcción de futuros profesionales, se promueva una sociedad justa, equitativa, solidaria, donde se difunda, respete y maximicen los derechos de las minorías, pero sobre todo un lugar donde las y los estudiantes se sientan seguros de ser y estar.